Los proyectos para ser apoyados tendrán como requisito fundamental la sustentabilidad e incluir algún componente de valor agregado diferencial. Es decir, deberán tener el potencial de ser viables desde el punto de vista económico-financiero y además, ser ideas de negocios basados en productos, servicios, procesos o formas de comercialización que tengan diferencias respecto a lo ya existente (entendemos como valor agregado diferencial la presencia de la creatividad en la idea o en la implementación del emprendimiento, o en alguna parte del mismo).