Por: Andrea Aguilera
La industria de los videojuegos tiene el potencial de convertirse en el nuevo semillero detonador de los empleos del futuro para generaciones más jóvenes que crecieron jugando y además, ser un método de enseñanza para diversos aprendizajes.
Los videojuegos forman parte de uno de los sectores de mayor crecimiento. Según el informe elaborado por el BID (Banco Interamericano de Desarrollo), “(...) se han convertido en líderes en ventas y en crecimiento en todo el mundo en la industria del entretenimiento. En los últimos cinco años, experimentaron un crecimiento del 56% (…) triplicando las ganancias proyectadas para la industria del cine”. Además de ser el sector de mayor facturación en la industria digital, también tiene un gran alcance en su oferta que pasa desde el mero entretenimiento hasta la creación de herramientas con fines educativos o de sensibilización de problemáticas sociales. Los videojuegos están en la categoría de “industrias creativas”, donde el capital fundamental es la creatividad humana.
En el marco de esta área de crecimiento, el pasado lunes 2 y martes 3 de diciembre tuvo lugar la tercera edición de Level UY, encuentro organizado por la Cámara de Videojuegos (CAVI) junto a Uruguay XXI, ANTEL y el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), que ofrece un espacio para que los desarrolladores expongan sus proyectos y realicen networking con expertos y posibles inversores, además de contar con charlas y talleres de destacados profesionales del área.
A primera vista los videojuegos pueden considerarse una distracción para pasar el tiempo, pero si atravesamos esta noción primaria, descubrimos que pueden optimizar la experiencia de las personas, mejorando el aprendizaje, la resolución de conflictos y el relacionamiento en equipos. A su vez, fomentan la educación y la preservación de las culturas. Un ejemplo claro de esto son los videojuegos sobre culturas indígenas de América Latina (Invaders, Techno Medicine Wheel y Survivance), que logran difundir y perpetuar mitos, creencias, lenguas y formas de actuar dentro de las comunidades indígenas expandiendo el conocimiento de las mismas hacia el mundo.
El mundo de los deportes no es ajeno a la influencia del gaming y generó un cambio en los modos de consumo, pasando de las canchas a la realidad virtual. Se gestó de este modo el concepto de “Esports”, que viene creciendo de forma sostenida y genera un área de oportunidades para desarrolladores, jugadores e inversionistas. En el estudio realizado por el BID y citado anteriormente “…el entrenamiento a nivel profesional de los jugadores de esports es muy similar al de un deportista tradicional (…), entrenan a diario varias horas con un director técnico, analizan y observan partidas de otros equipos, realizan ejercicios físicos para mantener la forma y trabajan con un psicólogo deportivo que los ayuda a soportar el estrés”. Ejemplos de videojuegos de esports son League of Legends, Super Smash Bros y FIFA, entre otros.
Desde Smart Talent nos acercamos a Ironhide Game Studio, Pincer Games y Widow Games para conocer de primera mano el desarrollo de sus empresas, del mercado de los videojuegos, su crecimiento a nivel local y global y sus percepciones a futuro sobre el negocio y el talento uruguayo.
Álvaro Azofra fundó, junto a Pablo Realini y Gonzalo Sande, Ironhide Game Studio en 2010 y en 2012 lanzó la exitosa saga “Kingdom Rush”, que llegó a liderar los ránkings de las tiendas App Store y Play Store y fue ganadora de numerosos premios. En esa línea, Azofra sostuvo que los videojuegos son bien vistos en el mercado global. En este link podés acceder a un webinar sobre cómo trabajar en videojuegos que organizamos desde Smart Talent en conjunto con el equipo de Ironhide.
Laia Barboza, cofundadora de Pincer Games -empresa de videojuegos creadora de “Fighters of fate” y “Scam Quest”, que se enfoca en desarrollos de videojuegos multijugador para dispositivos móviles con elementos de cartas coleccionables- nos contó que el emprendimiento surgió a raíz de la inspiración del Concurso Nacional de Videojuegos. Sus socios habían asistido a una premiación y quisieron sumarse al año siguiente.
Por su parte Widow Games nació de la mano de Martín Spinetto a mediados de 2012. Comenzó haciendo juegos distribuidos por los carriers de telecomunicaciones desarrollando los juegos de mesa para móviles más conocidos en el mercado argentino, como Carrera de Mente y T.E.G. Luego se introdujeron en el mercado brasileño y posteriormente al mexicano para crear la experiencia necesaria para llegar a donde están hoy, desarrollando proyectos de mayor complejidad, como es el caso de Geopoly, un juego para móviles con geolocalización y realidad aumentada donde los jugadores pueden comprar y vender propiedades de la vida real en un entorno virtual.
¿Cómo ha evolucionado la industria de los videojuegos en los últimos 20 años a nivel global y local?
Augusto Carrero, Game designer and Productor Owner de Widow Games, nos narra la historia de los videojuegos y para comenzar puntualiza que estamos ante un sector dentro de la industria del entretenimiento que no tiene más de 40 años, es muy joven en relación con el cine, teatro y música. Lo incipiente de esta área trae como resultado un potencial de crecimiento enorme, pero por otro lado poco know how. La falta de conocimiento fue una puerta para lo académico, por ejemplo, en Uruguay la Universidad ORT fue la primera en ofrecer la opción de estudiar la Licenciatura en Animación y Videojuegos, luego se fueron sumando otros centros educativos. La currícula cuenta con materias de programación, medios digitales, producción de video y animación, narrativa, arquitectura, diseño de juegos y marketing, entre otras.
Para Álvaro Azofra de Ironhide los hitos fundamentales en la evolución de la industria de los videojuegos son, en primer lugar, “las tiendas de descarga digital para PC y MAC, que permitieron a desarrolladores alcanzar un público global sin necesidad de intermediarios ni costos de distribución, luego los teléfonos móviles y sus tiendas digitales”. Estas últimas, además de simplificar la carga de los juegos a App Store, Google Play entre otros, y saltar de una distribución física a un entorno virtual, también llevaron a que los diseños tuvieran que evolucionar para adaptarse a los nuevos formatos.
La demanda del sector fue creciendo en el tiempo y según Carrero, muchos pensaban que los videojuegos iban a correr la suerte de una moda pasajera, pero para él se logró demostrar que “podrá cambiar de tecnología, podrá haber nuevos géneros de moda, podrán cambiar las plataformas o la forma de distribución, pero lo cierto es que los juegos llegaron para quedarse y cada vez pisan más fuerte”.
En comparación con la industria global aún queda mucho camino por andar, pero el camino para crecer y acortar esta brecha es la educación. Actualmente la formación académica es universitaria pero el foco debería ser impulsar la formación en programación, arte ilustrativo, composición musical y diseño de productos desde etapas más tempranas. “Tenemos que pensar en dónde la Inteligencia Artificial no podrá reemplazar al humano y la respuesta es: en industrias creativas”, concluye Carrero.
¿Qué lugar tienen los profesionales uruguayos en esto?
En América Latina y el Caribe existen 397 millones de jugadores concentrados principalmente en México, Brasil, Argentina, Colombia y Venezuela. El talento latinoamericano está cada vez más cerca de formar parte de un sector altamente competitivo donde se conjugan arte y tecnología para desarrollar los productos. El informe del BID destaca que esta industria "tiene el potencial de convertirse en el nuevo semillero detonador de los empleos del futuro para generaciones más jóvenes que crecieron jugando y ser un método de enseñanza para diversos aprendizajes".
Para Barboza “Uruguay tiene una combinación entre grandes profesionales y artistas, los casos de éxito respaldan su competencia a nivel internacional”. El potencial del talento está distribuido en diferentes rubros como diseño e ilustración, modelación 3D, producción y diseño de producto. Esto es favorable según Carrero de Widow Games, ya que entiende que el futuro en el mercado de los videojuegos es multidisciplinario y que se requerirán equipos de muchas áreas como especialistas en ciencia de datos, representantes comerciales y economistas.
Marco uruguayo: ¿qué instituciones impulsan el sector de los videojuegos?
En el plano local, la mayor parte de los juegos se desarrollan para exportar. A modo de impulsar el crecimiento del rubro se generó una política de exoneración de impuestos a las rentas empresariales y están liberados de IVA aquellos productos con contenido educativo adquiridos localmente. Acompañando el crecimiento del sector es que a través de convocatorias puntuales MIEM-Dinatel (Dirección Nacional de Telecomunicaciones) ofrece posibilidades de financiamiento de proyectos y en 2016 se fundó la Cámara Uruguaya de Desarrolladores de Videojuegos (CAVI) como punto de encuentro de las empresas, estudiantes y clientes. Otro soporte creado para coordinar y articular esfuerzos es la Mesa de Promoción de la Industria de videojuegos que incluye colaboradores de Uruguay XXI, la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), MIEM, ANTEL, la Cámara Uruguaya de Tecnologías de la Información (CUTI), CAVI e Ingenio-Latu.
Referencias:
Banco Interamericano de Desarrollo, (2019). “Los videojuegos no son un juego: los desconocidos éxitos de los estudios de América Latina y el Caribe”.
Universidad Católica del Uruguay, (2019). “Videojuegos: Oportunidades de Uruguay en Asia Pacífico”.